I.
desnudate los ojosle dijo el vagabundo
desnudate
no puedo
le contestó ella
tengo un blog del que hacerme cargo
él replicó
que un blog no era un hijo
ella, que un blog era
algo
casi nada,
pero era algo.
no podría desnudarse
él se quedó tan triste
pensando en que habría que cubrirse con velos internéticos
los ojos
para
como ella camina
que caminaba mirando,
cabeza en alto,
sin
desnudarse
los ojos